viernes, 15 de julio de 2022

Evangelio diario: 15-07-2022

Lectura del santo evangelio según san Mateo 12, 1-8

En aquel tiempo, atravesó Jesús en sábado un sembrado; los discípulos, que tenían hambre, empezaron a arrancar espigas y a comérselas.
Los fariseos, al verlo, le dijeron:
«Mira, tus discípulos están haciendo una cosa que no está permitida en sábado».
Les replicó:
«¿No habéis leído lo que hizo David, cuando él y sus hombres sintieron hambre? Entró en la casa de Dios y comieron de los panes de la proposición, cosa que no les estaba permitida ni a él ni a sus compañeros, sino solo a los sacerdotes. 
¿Y no habéis leído en la ley que los sacerdotes pueden violar el sábado en el templo sin incurrir en culpa? 
Pues os digo que aquí hay uno que es más que el templo. 
Si comprendierais lo que significa “quiero misericordia y no sacrificio”, no condenaríais a los inocentes. Porque el Hijo del hombre es señor del sábado».




Comentario

El debate sobre el sábado, que aparece con cierta frecuencia en los enfrentamientos de los fariseos con Jesús, a los cristianos del siglo XXI nos queda un poco lejos. Vitalmente no entendemos todas esas prohibiciones decretadas en el sábado y su importancia. Pero situándonos en aquel tiempo, hay que recordar que la Ley con sus 613 preceptos era tenida como venida de Dios. Atentar contra lo mandado por la Ley, incluido lo relativo al sábado, era atentar contra Dios.

Jesús, en este pasaje y en otros paralelos, deshace ese argumento. En esta ocasión, Jesús es tajante: “El Hijo del Hombre es señor del sábado”, esta es la clara respuesta de Jesús ante las acusaciones de los fariseos de ir en contra de lo prescrito en sábado. Si Jesús es señor del sábado, sus discípulos pueden arrancar espigas y comérselas si Él se lo permite.

Está también claro que la ley suprema para Jesús es el bien del hombre. Está permitido, también en sábado, hacer todo lo que haga bien al hombre y está prohibido todo lo que haga daño al hombre. Toda ley debe de estar al servicio del hombre y no al revés.