lunes, 1 de marzo de 2021

Evangelio diario: 01-03-2021

Lectura del santo evangelio según san Lucas 6, 36-38

En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos:
«Sed misericordiosos como vuestro Padre es misericordioso; no juzguéis, y no seréis juzgados; no condenéis, y no seréis condenados; perdonad, y seréis perdonados; dad, y se os dará: os verterán una medida generosa, colmada, remecida, rebosante, pues con la medida con que midiereis se os medirá a vosotros».




Comentario

El pasaje del Evangelio de Lucas de la liturgia de este lunes de cuaresma es una invitación expresa a amar a los demás como Dios nos ama.

¿Necesitamos el perdón de Dios, somos lo suficientemente valientes para desnudar nuestra alma totalmente ante El, y vivir la experiencia de su misericordia? Todos tenemos culpas que nos abruman, infidelidades y traiciones que nos avergüenzan... todos tenemos que aprender a perdonarnos tantas cosas... Y es mucho más fácil llegar a ese perdón, desde el perdón que nos llega con el Amor de Dios.

Necesitamos la experiencia de la misericordia con nosotros, para darnos cuenta de lo que implica ser misericordiosos con los demás. Y este es el reto que nos plantea Jesús en este discurso que sigue a las Bienaventuranzas. Nuestro amor puede ser pequeño, egoísta y mezquino. Hemos de amar con el amor con que Dios nos ama, el generoso y compasivo, el que no tiene medida, no juzga y perdona siempre. 

Nos da miedo amar así, a fondo perdido. No es más que volcar la misericordia que yo recibo, en los demás. Es reconocer que ese amor de Dios para mí, también es para todos. Así es el amor del Padre, y el que nos pide a sus hijos. Es el amor que libera, perdona, hace bien. Es el amor que arriesga y se entrega. Merece la pena, en esta cuaresma, revisar cómo es mi amor, qué calibre de generosidad y capacidad de perdón tiene.