“El Granero de José” nace para paliar de forma rápida y con una tramitación mínima las necesidades alimenticias, médicas, habitacionales y escolares de aquellas personas que sufren los efectos causados por el COVID-19 que golpea de forma brutal a las familias con la pérdida de seres queridos. A ese irremplazable hecho hay que sumar los estragos que la pandemia está causando en los hogares por la falta de recursos de todo tipo.
D. Juan del Río ha remitido a los capellanes, componentes de las Fuerzas Armadas, Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, fieles de la jurisdicción castrense y a todos los hombres y mujeres de buena voluntad una carta (al final de este post) explicando el origen, objetivo y funcionamiento de “El Granero de José” que necesita de sus aportaciones para afrontar las futuras peticiones que serán tramitadas de forma casi inmediata ya que deben solventar necesidades acuciantes y básicas.
Monseñor Juan del Río establece que Cáritas Castrense como eje fundamental de la acción caritativa dentro de su jurisdicción, asuma la responsabilidad de gestionar, administrar y fiscalizar “El Granero de José” (Gn 41, 53 ss) mediante un proceso transparente y rápido. Con el fin de dotar al Fondo de Emergencia de recursos económicos, se han habilitado una cuenta bancaria y una aplicación de teléfonos móviles para realizar las aportaciones.
El objetivo de Cáritas Castrense
Cáritas Castrense nació con el firme propósito de auxiliar y atender a cuantos más sufren entre los miembros y familias de nuestras Fuerzas Armadas y Cuerpos de Seguridad del Estado. Al mismo tiempo, desde sus inicios, Cáritas Castrense ha colaborado, en multitud de ocasiones, con las otras Cáritas diocesanas que, en las diócesis territoriales donde se encuentran ubicadas nuestras unidades, han pedido ayuda y colaboración.

Carta del Sr. Arzobispo castrense