sábado, 24 de julio de 2021

Evangelio diario: 24-07-2021

Lectura del santo evangelio según san Mateo 13, 24-30

En aquel tiempo, Jesús propuso otra parábola a la gente:
«El reino de los cielos se parece a un hombre que sembró buena semilla en su campo; pero, mientras los hombres dormían, un enemigo fue y sembró cizaña en medio del trigo y se marchó. Cuando empezaba a verdear y se formaba la espiga apareció también la cizaña. Entonces fueron los criados a decirle al amo:
“Señor, ¿no sembraste buena semilla en tu campo? ¿De dónde sale la cizaña?”
Él les dijo:
“Un enemigo lo ha hecho”.
Los criados le preguntaron:
“¿Quieres que vayamos a arrancarla?”
Pero él les respondió:
“No, que al recoger la cizaña podéis arrancar también el trigo. Dejadlos crecer juntos hasta la siega y cuando llegue la siega diré a los segadores: arrancad primero la cizaña y atadla en gavillas para quemarla, y el trigo almacenadlo en mi granero”».




Comentario

El Reino de los Cielos fue instaurado definitivamente por Jesús. Reino que se manifestará plenamente al final de los tiempos, después de que todos sus enemigos le sean sometidos. Será entonces cuando el Hijo entregue el Reino a su Padre y «Dios será todo en todos»

El camino para llegar a esta meta es largo y no admite atajos. Sí, debemos acoger, libremente, la verdad del amor de Dios.

Dios es Amor y es Verdad, y tanto el Amor como la Verdad no se imponen jamás: llaman a la puerta de nuestro corazón y de nuestra mente. Y, al abrirle la puerta, es cuando pueden entrar, infundiendo paz y alegría sin medida. Este es el modo de reinar de Dios, este es su proyecto de salvación.

En la expresión "Reino de Dios" la palabra "Dios" es genitivo subjetivo, lo que significa que Dios no es una añadidura al "reino" de la que se podría prescindir, porque Dios es el “Sujeto” del Reino.

Reino de Dios quiere decir: Dios reina. Él mismo está presente y es decisivo para todos los hombres. Él es el Sujeto y donde falta este Sujeto no queda nada del mensaje de Jesús, por lo que el Señor dice: «El Reino de Dios está en medio de vosotros», y este Reino se desarrolla donde se realiza la voluntad de Dios. Está presente donde hay personas que se abren a su llegada y es así como dejan que Dios entre en el mundo.

Jesús es el Reino de Dios en persona: el hombre en el cual Dios está en medio de nosotros y a través del cual podemos “tocar” a Dios. “Tocamos” a Dios cuando amamos a los hermanos.

Dios sabe de sobra, que en nosotros existe el mal pero tiene paciencia y no quiere intervenir cada vez que nos equivocamos, sino que nos deja un tiempo, dándonos oportunidad para que reflexionemos y cambiemos, y para que comprendamos bien, como nos narró en la parábola de la higuera, recalcando la actitud de su dueño: antes de darla definitivamente por estéril, le concedió tiempo para ver si daba fruto.